10.7.14

Cemento y mar

Este fin de semana embarcamos rumbo a Valencia para patinar el skatepark de Beteró. Para mí supone también un regreso a mi ciudad adoptiva por catorce años, ya echaba de menos el sol valenciano... Y sol fue precisamente lo que no nos faltó, el bowl se convertía en un auténtico horno de cemento que irradiaba calor como un demonio. Cuando ya no lo soportábamos más huíamos dirección a la playa para darnos una tregua en aguas del Mediterráneo.

El sábado nos dirigimos al Perellonet, después de un paseo por las dunas nos asomamos al enorme y ansiado mar Maditerráneo, hacía un raro día de fuerte oleaje (para Valencia) y disfrutamos jugando con las olas como niños. Al día siguiente, tras salir del skatepark con el tiempo más ajustado, cumplimos como auténticos turistas veraniegos madrileños y fuimos a comer y bañarnos a la Malvarrosa, todo un clásico!

Por la noche caíamos rendidos sin muchas fuerzas para irnos de fiesta, algunos se quedaron con ganas de explorar más a fondo la noche valenciana... pero no hay tiempo para todo! Regresamos a Madrid medio quemados por el sol, llenos de sal y con una sonrisa por las horas de patín y diversión pasadas juntos. Tenemos que volver!






1 comentario:

Héctor dijo...

Excelente posteo, otra vez...

Veo que las fotos con la prioridad del personaje al centro son tu marca registrada, tu sello personal. ¡Muy inspiradoras!

Y la del skater suspendido en el aire, ¡no puede ser más perfecta!

Comento nuevamente para que sea un pequeño incentivo y no te dé tanta pereza.

Aprendo en cada una de tus entradas.

Abrazo argento.

Héctor.